Tras las lecturas y visionado de los distintos documentales, procedimos a elaborar un diccionario prenatal en Moodle, con todos los términos nuevos aprendidos. Realizamos también un resumen tras ver el vídeo El bebé recién nacido, en que podemos ver cómo se dan distintas etapas en el nacimiento,la importancia de los vínculos madre-lactante, la impronta, el futuro apego, y los distintos reflejos, de los cuales también vimos una serie de vídeos: reflejo de los puntos cardinales, de succión, de enderezamiento de la cabeza, del abrazo de Moro, de prensión plantar y palmar, de Babinski, de natación, de reptación, patelar...
A continuación realizamos entre todas un resumen de la etapa prenatal con los conocimientos relativos a este más importantes:
De la concepción al nacimiento
encontramos tres etapas: germinal (primeros 14 días), embrionaria (de 2 a 8
semanas) y fetal (de 8 semanas al nacimiento), que dan lugar a la etapa
prenatal del ciclo vital. En la etapa prenatal el bebé se va formando poco a
poco durante 9 meses (38 semanas). Cuando el espermatozoide consigue llegar al
ovulo y fecundarle se formará el nuevo bebé que se alimentará gracias a la
madre. Al principio, será diminuto, un pequeño embrión, pero con el paso del
tiempo llegará a crecer y en cierto punto pasaremos a llamarle feto,
denominación aplicada hasta el momento que suceda el parto.
Durante el embarazo se da un
desarrollo enorme en el bebé: de un conjunto de células madre pasamos a un
entramado de células que forman órganos, aparatos y sistemas y a un ser con
estructura y aspecto de bebé humano. En los primeros meses se forma el sistema
nervioso, el corazón, los músculos y los órganos vitales. Asimismo, durante la
estancia en el útero se desarrollarán las extremidades. Se da también el
desarrollo de los sentidos, especialmente el oído, permitiendo que se
acostumbre a la voz de su madre y sonidos estimulantes que escuche a
diario. Se da también un desarrollo
exponencial de cerebro y encéfalo.
Surgen también los reflejos
mientras el bebé se halla en el útero materno. Se trata de un conjunto de
reacciones involuntarias que ayudarán al bebé a sobrevivir fuera del cuerpo de
la madre. Dentro del útero, el bebé está conectado a la madre por el cordón
umbilical, y la placenta es la encargada de proporcionar y filtrar aquello que
el bebé necesita para sobrevivir. La madre debe cuidar minuciosamente sus
hábitos para no sobrepasar la capacidad de filtrado de la placenta,
perjudicando al bebé con sustancias tóxicas. Son muchas las dificultades que
puede haber durante el desarrollo del
bebé y parto, desde la concepción hasta el nacimiento del bebé; la teratología
es la ciencia encargada de estudiar los posibles defectos de nacimiento.
Influyen factores como los hábitos maternos, el entorno y la herencia genética
del bebé. Existen pruebas, como las ecografías, amniocentesis o la biopsia de
vellosidades corónicas, que permiten observar posibles dificultades o defectos
surgidos durante la etapa prenatal, además de permitir un seguimiento del
desarrollo del bebé.
Finalmente, cuando la madre rompa
aguas tendrán lugar las fases del nacimiento: dilatación del cuello uterino,
descenso y salida del bebé y más tarde la expulsión de la placenta. Existen
bebés nacidos postérmino o pretérmino y bebés nacidos en término. Los
nacimientos pretérmino en ocasiones suponen que el bebé tenga mayores
dificultades en su desarrollo.
Una vez cortado el cordón umbilical, empieza una
nueva etapa: ahora el bebé respira por sí solo; sus reflejos, relacionados con
el sistema nervioso, le ayudan a sobrevivir. Estos reflejos pueden ser
estimulados incluso antes del nacimiento, en programas de estimulación
prenatal; algunos de estos reflejos permanecerán durante el desarrollo del bebé
mientras que otros desaparecen a lo largo de los meses. Nada más nacer se
realiza, en los primeros cinco minutos, una escala para medir el progreso y
salud del niño, la escala de Apgar. El bebé desarrollará un fuerte vínculo con
los padres; se desarrollará aproximadamente a las cuatro horas del nacimiento;
este vínculo será la base del apego.
Y con esto terminamos de estudiar la primera etapa del desarrollo humano. ¡Vamos a por la siguiente!
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